Amigos en el sexo

 
Curiosidad de amigos para descubrir el mundo swinger:

Si bien es cierto, que esta clase de sitios (club swingers) está mas diseñados para que concurran parejas estables, y poder allí realizar sus fantasías sexuales compartiéndolas con otras parejas. No quiere decir esto que otras clases de parejas (amigos simplemente) no puedan asistir a estos eventos, donde el esparcimiento sexual es el rey.

Para poder ingresar a esta clase de establecimientos, el único requisito que se exige es que la pareja esté compuesta por un hombre y una mujer. En ninguna parte le van a exigir oro requisito que no sea de género (masculino y femenino). Sin embargo, hay sitios swingers que permiten el ingreso de mujeres en pareja, mas no hombres en pareja.

Es normal ver una pareja, con una o dos amigas adicionales, el ingreso es permitido. Pero, no se permite que ingrese una pareja con otro amigo, Y mucho menos dos machos juntos, por muy hombres que sean, y menos si son gay.

Vale recordar, como bien se ha explicado en otros apartes de este tratado (ver menú Parejas swingers), que el homosexualismo entre hombres en un club swingers esta casi que vetado - por no decir prohibido y no bien visto en público -, este no es un lugar diseñado para locas, y mucho menos para que se vayan a sacudir su plumas allí. Ellos tienen otros lugares (establecimientos comerciales) diseñados con ese formatos.

Debemos recordar que una de las fantasías que mas valoran los hombres es ver a dos mujeres desnudas jugando eróticamente. No olvidemos que a los seres humanos nos encanta ver, observar. A otras personas le fascina ser observados, sienten placer que los vean chuleando.

No sobra decir que el 80% del erotismo que se ve en un club swinger lo ofrecen las mujeres entre ellas, mientras los hombres observan y otros se masturban, sin necesidad de ser parte activa.

Decíamos que una pareja de amigos (hombre - mujer) puede ingresar a un club swinger. No quiere decir esto que por el solo hecho de entrar juntos se vean obligados a tener relaciones sexuales entre ellos, o se obliguen a participar en actividades grupales eróticas.

Esta clase de parejas, por lo general hacen uso de su afinidad en la amistad para ir a conocer un sitio swingers que para alguno de los dos es un tema nuevo. Lo hacen mas por simple curiosidad.

Es de resaltar que la comunidad swinger, aquellas parejas que deciden asumir su sexualidad de manera mas abierta, se cuidan de aceptar que entre ellos participen personas de dudosa procedencia, es decir:

Un hombre que ingrese con una puta, golfa, zorra, perra, bandida, sucia, zunga. Si bien a su ingreso no hay que demostrar el grado de afinidad que se tiene, la comunidad swinger siempre está alerta de evaluar en silencio quien es quien, sobre todo las mujeres. No olvidemos que estos ambientes están mas rodeados de parejas estables. Obvio que en todo lugar abierto al público existe la posibilidad que ingresen personas que no son deseadas, para eso existen filtros al ingreso, que la misma cuminidad swinger exige.

Debe quedar claro, para aquellas personas que no conocen el ambiente swinger, es todo menos un prostíbulo o un sito abierto para ir a cazar cuanta mujer se atraviese. Se equivoca aquel que se llegue a imaginar eso. Si esa es la intención de algunos hombres, mueren engañados, y van a perder el tiempo allí.

Aprovecho la oportunidad, también, para decirle a las mujeres que se muestran algo inseguras con si mismas. Creen que en un club swinger pueden perder a su novio, esposo, compañero. Están muy equivocadas, si algo se logra en esta clase de establecimientos es fortalecer la relación de pareja, volverse los dos mas cómplices y mas unidos.

La sociedad, la familia, la religión nos ha enseñado muchas cosas, menos como manejar nuestras pasiones sin desarrollar sentimientos de culpa. La sexualidad por centurias ha sido un tema vedado y, cuando no, ha sido castrado de forma malsana dejando hondas secuelas que confunden nuestro comportamiento sexual, en veces.

No hay cosa mejor que uno sentir vientos de libertad donde uno pueda liberar las angustias de la libido sexual, y si este propósito se logra llevar adelante con nuestra pareja, es mayor nuestra felicidad. De manera categórica lo afirmo, los espacios que ofrece un club swinger son ideales para el fortalecimiento de la pareja, permitiendo que se construyan lazos de confianza fuertes.

Una relación de pareja se puede terminar por cualquier motivo, menos por haber concurrido a un sitio de estos. Por el contrario son estos lugares centros de reestablecimiento donde se puede recuperar la pasión sexual de los dos. Muchas parejas terminan por la monotonía, y mas los hombres que son tan curiosos en vivir aventuras de toda índole.