Consejos de valor incalculable

Hola,

Que placentero y reconfortante es escribir un mensaje para expresar un sentimiento de gratitud a una persona que de forma desinteresada me brindó su apoyo en un momento de mi vida. No veo mejor oportunidad, ahora que ha pasado ya la borrasca y más cuando las aguas han retomado nuevamente el cause del río.

Los consejos que me distes, fueron de un valor incalculable, sino no es por esa voz amiga en medio del desierto, ¿que sería de mi?.

Gracias te doy de todo corazón, no tengo con que pagarte, espero si, que el tiempo me de la oportunidad algún día de poder recompensarte de igual forma, aunque lo dudo, porque eres una persona de rebosante amor por los demás que la divinidad siempre te nutre y recompensa en esos momentos de acoso. De todas maneras si ese día llega, yo estaré a tu lado aunque sea en silencio.

Debo confesarte que de este impasse aprendí muchas cosa, una de ellas, a ver la vida de una forma diferente, a veces estamos muy atados a la materia que no nos permite ver otros caminos. Gracias por darme ese mensaje de verdad que lo necesitaba.

Tus palabras sembraron una semilla, a cada instante recuerdo lo que me decías, por eso espero cambiar, no solo por el bien propio mío, sino tambien para que notes que sí escuche y apliqué tus mensajes.

Para terminar no me queda más que decirte que me siento muy honrado de ser tu amigo, y espero serlo hasta la eternidad.

Te deseo lo mejor siempre.

Un abrazo.

Bye