Mujer que gana más dinero que su pareja

La sociedad actual está acostumbrada a que los hombres ganen más dinero que las mujeres. En un largo trayecto de la historia, los hombres se han encargado de llevar la manutención al hogar.

Sin embargo, en estos tiempos la situación ha cambió, ya es más común que algunas mujeres ganen más que los hombres, tengan vidas profesionales exitosas y una mayor independencia en el ámbito económico. Es una verdad que las mujeres ya no permanecen todo el tiempo en la casa, muchas asumen desafíos en el campo laboral y combinan sus tareas de madre con las de empleadas o empresarias de sus propios negocios.

Lo anterior hace que, muchas veces, la mujer gane más dinero que el hombre, presentándose dificultades relevantes en la relación de pareja. Los problemas pueden comenzar con un detonante diferente al relacionado con el dinero, pero con el tiempo sí se nota que algo diferente está pasando en el hogar que se ha construido.

Aunque no es un hecho para generalizar, comúnmente el hombre empieza a mostrar comportamientos propios que demuestran inseguridad, frustración y depresión. Estos sentimientos se dan a partir de ideas o reglas que ya se tienen como que “la persona que gana un mejor sueldo es porque es más inteligente y puede lograr mejores oportunidades”. Todo esto es producto de la relación de equivalencia que se ha hecho entre sueldo - poder, sueldo - éxito, éxito - admiración.

Las consecuencias de esa situación pueden derivar en comportamientos: Agresivos, infidelidad o búsqueda de nuevos hobbies. Todo como una manera de buscar un equilibrio en el manejo de la autoestima por parte del hombre afectado en su ego.

Por otro lado, la mujer también puede mostrar cambios al estar mejor remunerada que su pareja. Algunas empiezan a sentir que aumenta el control en la toma de decisiones y por lo tanto, el valor de opinión de su pareja se reduce.

La mujer también puede empezar a notar debilidades en su pareja que en los buenos momentos no había notado, tales como inseguridad, fluctuación constante de los estados emocionales o baja iniciativa.

¿Qué puede ocurrir en esta clase de relaciones?

  • Si está pensando en formalizar una relación de pareja estable (matrimonio), es mejor que lo piense bien, las posibilidades de éxito son exiguas, o mejor casi inexistentes. A no ser que la mujer sea horriblemente fea y no tenga otra posibilidad de conseguirse otro candidato.
  • Si la situación se presenta en una relación de personas jóvenes, en edades máximas de productividad, es muy probable que el compromiso asumido en matrimonio se rompa, y termine en un divorcio. Claro! existen hombres vividores que su única misión es acercarse a mujeres con dinero para ellos alcanzar o mantener un estatus social.
  • Si la relación de pareja lleva más de 20 años, y todo sobrevino en un momento inesperado, donde la mujer gane más dinero, existe menos probabilidades de divorcio en un 70 %. Los intereses de la vida ya son otros, quizás ambos ya han superado y aprendido a sortear otras clases de dificultades, mostrándolos como personas mas fuertes y maduras.
  • Ahora bien, muchas mujeres contraen nupcias - matrimonio, en admiración al dinero de su hombre. Si ella en el tránsito de su relación no ha logrado despertar, cultivar otros valores, es muy probable que abandone a su marido.
  • Siempre se ha dicho que el mejor afrodisíaco del hombre es el dinero, es la mejor pócima para ellas excitarse. Esta clase de mujeres sienten un placer inmenso en hacer sentir que su hombre es un esclavo de ella. Gozan quitándole el dinero a cualquier costa. Si ellas entran a ganar más dinero que ellos, jamás van a permitir que su esclavo les quite lo de ellas, mejor se buscan otro de su preferencia.
  • Una mujer hermosa, profesional, brillante, de retos altos jamás va a permitir que su hombre no esté a la altura de ella. En cambio, sí es una gorda, descuidada en su aspecto personal, y el bien plantado, hasta se lo puede aguantar por no quedarse sola.

Conclusión: Son pocas las parejas que sobreviven a estos inconvenientes.