Tu indiferencia duele

Hola, nena:

Te confieso que no escuchar tu voz es algo extraño para mí en estos días, me gustaría saber la razón de tu silencio. Si algo te ha incomodado últimamente de mí, me gustaría saberlo. La amistad crece cuando los dos juntos superamos los momentos de dificultad, no con una actitud de silencio como la que estás asumiendo en estos momentos.

Lo lindo es que los dos nos sentemos y hablemos todo lo que tengamos que decirnos, sin ocultarnos nada. Tu indiferencia duele, sin duda me hace sentir triste.

Como puedes notar, estoy poniendo todo de mi parte para escucharte, ahora me gustaría saber que piensas. No se te olvide que, por nada del mundo quiero perderte, por el contrario deseo verte lo mas pronto, para seguir cultivando esta hermosa amistad que siempre hemos mantenido.

Si algo te ha incomodado de mi, perdóname...

Besos

Gabriel Jaime