Gracias por tu paciencia

Aprovecho ahora para darte las gracias por el apoyo que me brindaste prestándome ese dinero cuando más lo necesitaba. Discúlpame si me demoré un poco en efectuar el pago, mi intención no fue esa. Debes comprender que a veces uno quiere, pero no puede. No te alcanzas a imaginar las dificultades que he tenido.

Si todo este tiempo he estado en silencio es por física pena contigo, no sabes lo duro que era para mi saber que te debía y no poder cumplir con el plazo que me diste. Discúlpame de verdad, ojalá este impasse no sea motivo para distanciarnos, me dolería en el alma saber que por mi culpa nuestra amistad se pueda ver afectada de alguna manera.

Los tiempos actuales no son nada fáciles, para mí estos momentos se han vuelto bien complicados, mis negocios no van bien como yo esperaba. Gracias por tenerme tanta paciencia en saberme esperar, valoro mucho ese gesto de parte tuya.

Amigos así no son fáciles de encontrar.