Jamas olvidare a mi hombre

Hola Frank:

Lo nuestro terminó y lo tengo claro, pero quiero confesarte que no ha sido nada fácil para mí, olvidar todas tus cosas. Han pasado muchos meses, las vivencias a tu lado jamás buscarán los recodos del olvido.

Ese morbo delicioso, que infligías, llenando mis oídos con las palabras más vulgares que he podido escuchar, retumbaba en mi cuca, como látigos de fuego. Eran coros celestiales de placer, que retorcían mis ojos para que sin piedad flagelaras con tus manos todo mi cuerpo, dejándome vencida de dolor, pero ardiendo de placer. Gracias mi amor.

Esa malicia depravada, con cara de enfermo sexual que ponías cuando me penetrabas, con tu dura verga, bastaba para mojarme y ahogar mi respiración. Ningún otro hombre logrará eso, sólo tú fuiste capaz de explorar mis instintos salvajes de mujer. Gracias mi macho.

La verdad, ha sido difícil poder ser feliz nuevamente, he estado con infinidad de hombres tratando de encontrar unos brazos que me llenen de excitación, pero nadie ha podido superar tu mando, tu disciplina, haciéndome sentir tu esclava.

Marcaste para siempre el placer de mi cuerpo. Daría mi vida por verte un segundo no más, aunque fuera a la distancia, pero imposible tú no lo permites, lo siento como un castigo divino.

En mis noches desesperadas por verte, te hablo en silencio, entro en delirio, me imagino tu cuerpo desnudo recorriendo con mis labios palmo a palmo los rincones morbosos de tu cuerpo, que fueron míos, y que hoy otra mujer ocupa mi lugar, no lo dudo.

Soy la mujer más triste por haber perdido a mi hombre...

Un abrazo, porque si te doy un beso me lo rechazas.

Ángela María