Lindo lo que vivimos


Mi princesa hermosa:

Siempre que hablo contigo, siento que ambos tenemos los mismos propósitos de encontrar esa persona que llene las expectativas de nuestro corazón. Que bueno saber que los dos sin darnos cuenta nos vamos volviendo cómplices de nuestros sentimientos. Las horas pasan, los días siguen marcando su propio devenir y siempre recordándonos a cada instante, imaginándonos mil cosas que pueden suceder.

Que te puedo decir de todo esto, la verdad yo soy el primer sorprendido con esto que nos está sucediendo, me siento mas vivo que nunca, mas soñador que antes. No quiero pensar mucho, y menos en detenerme a razonar en situaciones que pueden frenar las ganas que tengo por conocerte. Trataré de ser lo mas irresponsable posible en dar rienda suelta a las expresiones sinceras de mi sentimientos.

Que la voluntad del cielo que nos surca sea la única responsable de nuestros actos, espero que tu también hagas de esta intención un propósito indeclinable entre nosotros para que nada nos detenga. La sola oportunidad de habernos conocido es de por si una complicidad de la divinidad, no dejemos pasar por alto sin pena ni gloria este momento tan hermoso. Somos tú y yo, los únicos responsables de hacer este sueño una posible realidad.

Te deseo siempre lo mejor, con ganas infinitas por abrazarte.