Mi hermana no va a cambiar

Querido papá:

Pocas veces he tenido la oportunidad de escribirte algo, hubiera preferido otras circunstancias para expresarte el cariño que siempre he sentido por ti, pero hoy las razones son otras que me obligan a expresarte lo siguiente:

No soporto un segundo mas que sigas dándole dinero a mi hermana. Dime que razones aduce ella para justificar recibir un dinero de parte tuya. Acaso te ayuda en tu trabajo... El único esfuerzo que le conozco es pedirte, y buscar la forma de sacarte más y mas. Padre, los hijos también requerimos de sentir necesidades, es una ley natural e indispensable para poder surgir.

Si todo lo das y lo ofreces en bandeja de plata, nunca vamos a aprender a valorar lo que cuesta alcanzar nuestros sueños. Lo que estás haciendo ahora no es lo correcto, la responsabilidad de un padre es educar, formar, y no creo que la conducta que estás asumiendo sea lo mejor para el futuro de mi hermana. Si continúas en la misma tónica en resolverle todos sus problemas económicos, daño grave le estás haciendo para su futuro.

Ella nunca va a sentir la necesidad de salir a buscar trabajo ¿para que?, si tiene alguien que siempre le da. Claro!!! La disculpa siempre será que no consigue donde ubicarse laboralmente. Obvio, como ella no ha tenido necesidades se torna exigente y engreída en trabajar donde ella quiere, y casi que exigir ser la gerente, directora y ponerse su propio sueldo.

Papá, no es justo que después de haberle dado todos los estudios necesarios para salir adelante, sigas todavía sosteniéndola un 100 %. Si ella no puede ubicarse en su profesión, que busque otras opciones donde ella se pueda desempeñar.

No quiero que tú creas que estas líneas se fundan en sentimientos de bronca contra mi hermana, reconozco que he sido firme en mi posición siempre. Me da pavor ver pasar los años, y que todo siga igual manteniéndola siempre.

Me gustaría que hablaras con ella, exigiéndole mas.