Quiero un concepto del matrimonio

He leído con detenimiento muchos de los textos que ustedes escriben en este sitio Web, me llama la atención la forma diferente como enfocan los problemas y situaciones que se presenta en una relación de pareja. Ese realismo y franqueza como abordan los temas me anima a plantearles una pregunta sobre que concepto tiene para ustedes el matrimonio. Soy una mujer de 34 años, profesional, sin pareja en la actualidad. Saludos desde La Argentina.

Respuesta:

Antes de atender su pregunta le advertimos que en la parte final del texto ofrecemos un apéndice que nos remonta a la historia del matrimonio. Quizás pueda servir de complemento académico esta información.

Introducción

El matrimonio como institución que surge para reglar las relaciones entre un hombre y una mujer, es una organización arcaica que va en contra de la esencia del ser humano. La misma palabra se encuentra totalmente prostituida en su parte sustantiva, por la forma en que se concibe la relación de pareja desde la óptica de la monogamia (fidelidad) y del amor mismo.

Sexo - Fidelidad

Cuando un hombre se compromete en matrimonio colocando como baluarte principal ser fiel incurre en falsedad. Genéticamente el hombre no está dotado de esta característica para asumir este grado de responsabilidad en esta clase de contrato social. Es por eso que el matrimonio siempre ha sido un fracaso cuando se entra a evaluar el manejo de la fidelidad por parte del hombre.

Amor

Quizás es una de las palabras mas usadas en las relaciones de los seres humanos, pero nadie en el mundo ha sido capaz de ofrecer una definición ajustada que permita decantar de qué se trata el amor, en que consiste. Todas las aproximaciones que se ofrecen sólo han servido para adornar cantidad de libros y poemas, de resto ha sido imposible llegar a una conclusión que nos brinde certeza de verdad.

Ahora bien si el objeto del contrato no está claramente definido, como pueden dos personas obligarse a prometer "amor" si ambos contratantes tienen conceptos diferentes de lo que si gnifica el concepto de amor. Es por eso también que el matrimonio ha sido un fracaso. La disyuntiva que muestra el concepto del amor hace mas difícil allanar la armonía en la convivencia de la pareja.

Patrimonio de familia

Para estos fines concretos el contrato de matrimonio ha sido exitoso y, ha permitido que la sociedad viva en un ajustado orden de convivencia: La patria potestad, sociedad conyugal, derecho de los herederos, etc.

Una forma de interpretar el matrimonio

Las carencias del ser humano son muy profundas y difíciles de resolver, aún en todo el tránsito de su existencia. El género humano es mutante, vive en constante movimiento volviéndolo a cada instante un ser ambivalente y pendular en cada uno de sus pensamientos, tanto a nivel consciente como inconsciente. De ahí entonces que sea un imposible categórico tratar de encuadrar, demarcar, obligar la expresión de su voluntad (amor - fidelidad) a la permanencia en el tiempo, y menos en los temas del amor y del sexo.

Es por eso que, sociedades mas civilizadas a la nuestra (Holanda) han comenzado a revaluar el concepto de matrimonio en su parte jurídica con el fin de interpretar mejor el sentir de la expresión de la voluntad de los contrayentes, fijando un plazo fijo a la vigencia del matrimonio con posibilidad de prorroga de un año sucesivamente.

Esta nueva figura contractual, consigna en su espíritu legal una interpretación mas ajustada de lo que significa el amor en una relación de pareja. Al fijar el plazo de la vigencia del negocio jurídico está aceptando de plano que el amor no es eterno ni perenne como se ha querido interpretar siempre.

Sin duda esta clase de ajustes sociales sirven tanto para el hombre como para la mujer entrar a construir otras formas de convivencia a nivel de la pareja sobre conceptos mas reales, aceptando que la fascinación del amor y la apetencia del sexo pueden desaparecer en cualquier momento.

Es de advertir que una cosa es el matrimonio como institución y otra muy diferente son las relaciones de pareja. Por ley natural el hombre y la mujer necesitan vivir en convivencia, los únicos seres que pueden vivir aislados son los grandes maestros y las bestias, los demás mundanos nacimos programados para convivir en sociedad. Esto no quiere decir que tengamos que vivir con la misma persona toda una vida, ahí está el error cuando interpretamos que el amor es perpetuo.

Cuando las relaciones afectivas se fundan y sustentan en principios nobles como:

  • Ayudarnos mutuamente
  • Apoyarnos en la dificultad
  • Libertad de pensamientos y actos
  • Aceptación de los errores del otro (esto no quiere decir tolerancia, eso sería aguantar, se interpreta como resignación)
  • Capacidad de perdón
  • Desapego del tener y del deseo
  • Cultivar la felicidad al interior del individuo, nunca en un tercero

Si la construcción de una relación en pareja se sustentara por convicción en estos principios, la convivencia entre hombre y mujer sería mas estable y permanente en el tiempo, disfrutando de una mejor armonía. En este orden de ideas el amor y el sexo no sirven como un elemento determinador para tomar una decisión de vivir en pareja. Es un error en el cual se ha incurrido siempre, los resultados en esta materia son palpable e inocultables, fracasos y fracasos.

  • El sexo: Sólo sirve para el desfogue de las pasiones de la libido, y para procrear.
  • El amor: Sólo ha servido como una forma de encubrir los sentimientos que se crean a través de las emociones: Posesión, egoísmo, etc.


Anexo:

Historia

Su mismo origen fue impositivo, creado en la época de Constantino con un fin particular y jurídico a nivel patrimonial. Fue una decisión pragmática el origen de este contrato social, fundado por este emperador, para efectos netamente administrativos en materia de derechos y deberes de los herederos.

Como se puede decantar la institución matrimonial, como organización monógama de un hombre para una sola mujer surgió a la vida jurídica con pretensiones exclusivas de poder gobernar mejor a los asociados - todos los romanos- , diferenciando así el patrimonio y derechos de un grupo familiar de otro.

El imperio crecía en número de personas, y día a día aumentaban los conflictos y disputas por parte de los herederos, hijos habidos con diferentes mujeres. Para evitar estos impasses y disputa por los bienes del padre la ley ordenó que sólo tenían derecho a reclamar los bienes los hijos habidos dentro del matrimonio - contrato jurídico celebrado con una mujer, los demás hijos habidos con otras mujeres no podían disfrutar de la masa patrimonial del padre.

Ahora bien, a través de la historia han surgido una cantidad de debates a nivel teológico tratando de obligar al hombre en asumir comportamientos monogámicos, cuando por ley natural es y ha sido un ser infiel en su esencia.

Las doctrinas de fe en occidente sustentan sus razones en la Biblia, para justificar la monogamia en el matrimonio, un libro que a través de la historia ha sido manipulado de acuerdo a los intereses de cada intérprete. Basta observar la cantidad de cismas que han surgido dentro de la iglesia para la creación de nuevas vertientes del cristianismo.

La Biblia es un código de conducta donde muchos papas han dejado su huella escrita para reglar normas de comportamiento del ser humano. Con argucias, juegos de palabras y malabares en la sintaxis hacen aparecer sus mandatos como si fueran principios divinos. Flaco daño le han hecho a la humanidad en lo referente a las relaciones afectivas en pareja.

La Biblia es un libro compuesto por el antiguo testamento y el nuevo testamento, pero con sorpresa un observa que sólo se cambia o se insertan textos en el nuevo testamento. Cabe preguntarnos porque nunca se toca el antiguo testamento, lleno de sangre (crímenes de los profetas) y poligamia. La respuesta es simple son los libros sagrados del judaísmo, y con ellos es mejor no meterse para evitar conflictos. Sólo modifican lo que escribieron los cristianos, las historias literarias creada por los evangelistas, que comenzaron a ser escritas 46 años después de la muerte del maestro Jesús, vale anotar que ninguno de estos ensayistas conocieron a Cristo nuestro señor en vida. Para revestir de divinidad las historias de Jesús elevan a dogma divino los escritos de estos de estos señores, aduciendo que son iluminados por el Espíritu Santo.

El ser humano, desde sus mismos orígenes ha buscado con desespero y ansiedad la benevolencia y favor de los dioses con el fin de encontrar la felicidad interior de su ser. Ante la incapacidad de lograrlo por sus propios medios ha recurrido a diferentes medios y métodos para tratar de alcanzar lo que él no ha sido capaz de encontrar. Todas estas falencias y carencias que sufre el individuo son aprovechadas, magistralmente, por todas las iglesias para adelantar sus propósitos de manipulación, coartando el sagrado derecho que tiene la persona para tomar sus propias decisiones.

Es aquí donde se cimenta con rigor extremo la definición del pecado:

  • Si no sigues los mandatos divinos, te condenas...
  • Si no sigues la palabra ofendes al señor...
  • Si no eres fiel a tu mujer no entrarás al reino de los cielos e incurres en pecado grave
  • Si no haces ofrenda al altar ($$$) no recibirás benevolencia del Señor

El producto principal de todas las iglesias es brindar la posibilidad de adquirir la felicidad, pero como ellos mismos saben que esta labor es mas compleja de lo que se cree por eso se expresan así para no perder vigencia:

  • No te preocupes tanto de la felicidad terrenal, si tu haces lo que yo te digo podrás encontrar la felicidad eterna
  • Si infringes los principios de la Biblia nunca podrás encontrar la felicidad en tu vida
  • Lee la Biblia, sigue sus mandatos y verás que encontrarás el reino de los cielos cuando mueras